apropiación desde el concepto.
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parte 2 de 5
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APROPIACIÓN
repensar nuestra relación con la arquitectura
Los destinatarios de las viviendas están excluidos del proceso que las genera. Son pasivos y sufren la vivienda como una fatalidad.1 Mientras que en el caso del emblemático proyecto de Aravena el trabajo de los habitantes viene después, otras iniciativas permiten al ocupante participar activamente en la conceptualización del proyecto. Es el caso, por ejemplo, de la agencia Rural Studio, a través de su serie de casas llamada "20K House Experiments", intenta respetar un presupuesto de 20,000 dólares por casa. El equipo de Rural Studio, junto con estudiantes y voluntarios, acudió en ayuda de los ciudadanos que se vieron privados de su ideal de vivienda unifamiliar por la crisis de subprimes. Este proyecto, que tuvo lugar en el estado de Alabama (Estados Unidos), comenzó en 2005 y terminó en 2011. Los puntos comunes de estas casas son: el empleo de materiales "rudimentarios" -que constituyen una gran parte del presupuesto-, la presencia de "umbrales" que permite extender la vida doméstica y esta voluntad de responder a las expectativas de cada habitante. Al contrario de la estrategia del proyecto Quinta Monroy, las 20K House Experiments transmiten intrínsecamente la imagen de sus ocupantes y el uso del presupuesto privilegia la personalización inmediata frente la apropiación en un segundo momento. La relación entre el ocupante y el espacio se establece desde la fase de diseño; mientras Aravena propone una vivienda similar a todas las demás, Rural Studio diseña casas que transcriben la identidad y, en la mayoría de los casos, llevan el nombre de su propietario. El presupuesto limitado reduce el tamaño de la casa, pero a pesar de ello, una gran parte de los espacios se extienden: patios, porches o terrazas. Las cabañas generadas ofrecen más autonomía y son una forma de conectar a los habitantes con los contextos que los acogen, a menudo la naturaleza.
1. — Catsaros, C. Sud. L. (2010) Construire ensemble le grand ensemble, habiter autrement, Arles: Ed. NAC
20K House Experiments
bocetos de Frank’s House, MacArthur’s Houses, Elizabeth’s House y Dave’s House realizados en el marco de 20k House Experiments de Rural Studio, entre 2005 y 2010.
© Romain Roy-Pinot
Esta postura de apropiación inmediata es compartida por Lucien Kroll, para quien es importante, naturalmente, permitir a los usuarios diseñar sus propios espacios [...] y no proponer nada demasiado específico: sólo posibilidades, estímulos.1 El papel del arquitecto es, una vez más, el de un guía, una especie de instigador que establece las reglas de un juego de construcción, que a su vez están destinadas a evolucionar. Hablando de juego de construcción, la arquitectura representa un mundo muy "codificado" y a veces poco accesible, los medios a utilizar para la participación del ocupante son determinantes. El estudio mexicano Taller Comunal ha creado herramientas para ayudar a las víctimas de terremotos a determinar cómo reconstruir sus casas. El programa busca facilitar y acompañar procesos sociales de reconstrucción, no sólo de hogares, sino de cadenas productivas locales y vínculos comunitarios.3 El taller cuenta con diferentes herramientas: un manual de autoconstrucción en el cual se detallan explicaciones de métodos de construcción accesibles a todos, maquetas personalizadas para pensar de la mano con las comunidades la configuración urbanísticas de su pueblo o juegos de construcción para entender los sistemas constructivos y las distribuciones de espacios. Para Yona Friedman, la participación del habitante es tan importante como la participación del arquitecto4 Con demasiada frecuencia, las cuestiones de dogma arquitectónico recaen en actores de la construcción que no son arquitectos. Por eso, la postura del constructor es esencial para garantizar el "derecho a la palabra" del ocupante. La participación del habitante es actualmente sólo una fachada: los planificadores realizan encuestas y luego declaran que el habitante, al responder a sus preguntas de tal o cual manera, ha demostrado tal o cual voluntad, tal o cual preferencia. Con esta llamada participación, el habitante no decide nada, sino que ayuda a los planificadores a decidir por él.5
