PATRIMONIO CULTURAL, MATERIAL E INMATERIAL

 

EL DESAFÍO DE IDENTIFICAR, REGISTRAR Y PRESERVAR LO INTANGIBLE

autor

Romain Roy-Pinot

serie de 3 artículos

para aprehender el seminario “Patrimonios tangible e intangible desde la investigación”

 

La historia ha integrado a México como un territorio muy peculiar. Puerta de entrada de la Conquista, lo que es hoy México era llamado durante casi tres siglos la “Nueva España”, donde convivieron descendientes españoles, miembros de comunidades originarias y mestizos. Si los argentinos llegaron de los barcos,1 en México, el mestizaje cultural perdura y es solamente hasta 1992 que se mencionó en la reforma del artículo 2o. de la Constitución mexicana que la nación mexicana tiene una composición pluricultural sustentada originalmente en sus pueblos indígenas.2 Al respecto, el investigador de la UNAM, el Dr. Jorge Alberto González Galván afirma: Por primera vez en nuestra historia tenemos que construir nosotros mismos (indígenas y no indígenas) los puentes que nos unan y faciliten la circulación, justa y digna, de nuestras semejanzas y diferencias. Nada impide, por supuesto, que conozcamos los materiales y puentes existentes en otros países. Sin embargo, es de acuerdo con las condiciones de nuestro terreno, nuestro clima, nuestra buena fe, nuestra sensatez y nuestros sueños, que tendremos que proyectar, construir, preservar e ir modificando los puentes necesarios para estar todos comunicados. El puente que se tendría que construir, pues, sería aquel que permitiera a cada nación y cultura (mexicana, indígenas, extranjeras) el efectivo acceso a su propia jurisdicción, primero; y por formar parte de un todo, a la subordinación y efectivo acceso a la jurisdicción del Estado de todos. No hay manuales que nos digan cómo hacerlo.3

 

1. — alusión al discurso del presidente argentino Alberto Fernández, ante Pedro Sánchez, presidente del Gobierno Español, en el Museo del Bicentenario, Buenos Aires, el 10 de junio del 2021. El presidente de Argentina atribuyó de manera errónea la frase siguiente a Octavio Paz: “Los mexicanos salieron de los indios, los brasileños salieron de la selva, pero nosotros los argentinos llegamos de los barcos. Eran barcos que venían de allí, de Europa. Y así construimos nuestra sociedad.”

2. — Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos [Const]. Art. 2, 5 de febrero de 1917 (México). — texto vigente.

3. — Gonzalez Galvan, J.A. (1998) La reforma indígena: hacia una Constitución plurinacional y pluricultural, México: Ed. UNAM, Instituto de Investigaciones Jurídicas.

Sala mexica del Museo Nacional de Arqueología,
El “Salón de Monolitos” se inauguró en 1887 para exhibir piezas de gran formato originalmente ubicadas en el patio del museo; foto tomada entre 1905 y 1910.
© Fondo Archivo Casasola. Secretaría de Cultura.

 

A pesar de la inquisición y de la evangelización que ejerció sobre las poblaciones de la Nueva España, el legado indígena de México es incuestionable. Si la Conquista ha establecido su poder edificando arquitecturas religiosas sobre vestigios originarios, la cultura originaria sigue presente y con ella muchas de sus manifestaciones culturales como innumerables platillos ancestrales, 68 lenguas indígenas que se siguen hablando y numerosas comunidades que mantienen un patrimonio inmaterial de usos y costumbres. El patrimonio cultural de México se manifiesta tanto de manera material como inmaterial. La primera iniciativa para identificar y cuidar el “patrimonio cultural mexicano” fue la Carta de México de 1976 (Carta de México en defensa del Patrimonio Cultural) en la cual, cumple señalar que el patrimonio cultural humano comprende tanto las creaciones heredadas del pasado, que deben ser identificadas, defendidas y preservadas, y también principalmente la protección de la herencia viva de técnicas tradicionales, habilidades artísticas, de sensibilidades estéticas, de creencias y comprensiones a través de las cuales los pueblos actuales se expresan.4 A nivel internacional, la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, que tuvo lugar en 2003, en París, considera la importancia que reviste el patrimonio cultural inmaterial, crisol de la diversidad cultural y garante del desarrollo sostenible5 y establece la definición del “patrimonio cultural inmaterial” como los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas -junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son inherentes- que las comunidades, los grupos y en algunos casos los individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural.6

4. — La carta de México en Defensa del Patrimonio Cultural [Carta] 12 de agosto de 1976. (México). — texto vigente

5. — Convención para la salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial [Reporte oficial por UNESCO] 17 de octubre de 2003. (París).
6. — ibid.

7. – Gallardo, A. P. (2021, 29 de abril). “Patrimonios tangibles e intangibles desde la investigación”. Seminario.

Si la conservación del patrimonio material representa un reto, la labor de identificación, registro y preservación del patrimonio cultural inmaterial es aún más compleja. El 29 de abril de 2021, el seminario de discusión “Patrimonios tangible e intangible desde la investigación” nos dio una mejor idea de todo lo que implica el rol de cada actor de la restauración y conservación del patrimonio inmaterial mexicano. Este seminario fue dirigido y coordinado por Patricia Gallardo Arias, de la dirección de Etnohistoria-INAH, que a través de este evento cuestiona la revalorización de las identidades locales y regionales7 y cuatro ponentes fueron invitados (por orden de aparición):

 

Teresa Rojas Rabiela
Investigadora en el CIESAS

especializada en Historia de la Tecnología agrícola e hidráulica.

 

Cuauhtémoc Velasco Ávila
Director de DETNOH-INAH

especializado en Historia de la minería en México, en las relaciones fronterizas con los grupos nómadas en el Norte de México y en documentación para la historia de la familia en México.

 

Aida Castilleja González
Secretaría Técnica del INAH

especializada en líneas de investigación sobre estudios regionales, demografía, organización social, migración y sistema de intercambio, así como en organización social de los pueblos indígenas de México, en patrimonio cultural y patrimonio biocultural y en cambio social y cultural desde una perspectiva ambiental y categorías sociales y culturales referidas al espacio.

 

Carlos Sola Ayape,
Presidente de la Asociación Cultural Ermita de San Zoilo de Casera,

especializado en relaciones bilaterales entre México y España durante el siglo XX, en el Exilio Español, en el Franquismo y en el Hispanismo Mexicano.

 

Este seminario virtual es la mayor inspiración y guía del texto presente; cada ponente contribuyó de manera complementaria a definir un espectro amplio de estrategias, experiencias y análisis de la condición actual del patrimonio cultural de México, sea tangible o intangible.

 

seminario a visualizar aquí: Patrimonios tangible e intangible desde la investigación o al final de esta página.

 


 

conclusión.

 

El patrimonio cultural mexicano se constituye tanto de lo material como de lo inmaterial. No se debe ejercer ninguna forma de jerarquización entre un patrimonio tangible y un patrimonio intangible; ninguno prevalece sobre el otro. Ambos forman parte de un contexto que cuando se fragmenta, se incurre en la presión de la descontextualización y por ahí puede haber valoraciones, conceptualizaciones e incluso caminos que nos alejan en definitiva de la verdad.8 El patrimonio cultural es esencial en la comprensión de nuestra sociedad, en realidad, los bienes muebles e inmuebles que recibimos del pasado se constituyen en elementos que permiten el contacto entre una sociedad perdida y una actuante.9 Más allá de escribir nuestra historia y de determinar con más detalles cada faceta de nuestra cultura, el patrimonio es memoria colectiva, es historia, es sustento también para crear, innovar y también para construir su propia visión de presente y de futuro.10

8. — Sola Ayape, C. (2021, 29 de abril). “Patrimonios tangibles e intangibles desde la investigación”. Seminario.

9. — Velasco Ávila, C.  (2021, 29 de abril). “Patrimonios tangibles e intangibles desde la investigación”. Seminario.

10. — Sola Ayape, C. (2021, 29 de abril). “Patrimonios tangibles e intangibles desde la investigación”. Seminario.
11. — ibid.

 

El historiador Carlos Sola Ayape insiste en el hecho de que tenemos el gran desafío de la globalización, que es un elemento por momentos que diluye muchas aristas de las personalidades identitarias y hay que tener muy en cuenta por las consecuencias que esto pudiera derivar.11 La preocupación que representa la globalización estuvo ya mencionada en la Carta de México de 1976:

 
 

”El proceso mundial en curso presenta dos tendencias generales mutuamente opuestas cuya comprensión es de importancia crucial para la defensa de los valores humanos, tales son:

En primer lugar, una tendencia homogeneizadora que amenaza uniformar los modos de ser, de hacer y de sentir de todos los pueblos de la Tierra, con la consecuente pérdida de las características distintivas que los singularizan y les permiten expresarse a través de la creatividad propia.

En segundo lugar, una tendencia diversificadora, que apenas empieza a manifestarse a través de la creciente resistencia de los pueblos oprimidos a su avasallamiento cultural.

[...]

En el plano cultural, es aterradora, la amenaza de que sólo entreguemos a nuestros nietos bodegas museológicas llenas de las creaciones de nuestros abuelos. Es decir, que por la acción destructiva directa y por inacción en la defensa de los requisitos necesarios para el ejercicio de la creatividad, privemos de la herencia a nuestros sucesores de lo que el hombre tiene de más noble: su capacidad de rehacerse a sí mismo en libertad y de la capacidad de expresarse en múltiples formas.

Esta amenaza no es una quimera, toda vez que se concreta tanto por la acción de diversos medios modernos de comunicación de amplitud mundial que erosionan las energías creativas locales de todos los pueblos como por la explotación de su trabajo y la mercantilización del turismo, además de otras formas de agresión que avasallan y corrompen las comunidades humanas más creativas.

Nuestra esperanza de que la creatividad humana se salve reside tan sólo en las referidas resistencias que empiezan a esbozarse en los pueblos dominados. Pero estas esperanzas sólo podrán florecer si los Estados por fin admiten que el interés de sus pueblos no está en la homogeneización, sino en aceptar la pluralidad de culturas dentro del contexto de la nación.”12

12. — La carta de México en Defensa del Patrimonio Cultural [Carta] 12 de agosto de 1976. (México). — texto vigente

 
 

Los puntos que destaca la Carta de México en defensa del Patrimonio Cultural, siguen siendo preocupantes todavía en 2022. Además de la globalización que impacta a todo el mundo, los cambios climáticos van a forzar a muchas comunidades a exiliarse. Identificar, registrar y preservar el patrimonio cultural pasará también por un esfuerzo de acompañamiento de las comunidades, al fin de asegurarse que los territorios puedan seguir ofreciendo condiciones óptimas para que se exprese el patrimonio cultural.

 

 

datos de la exposición.

Patrimonios tangible e intangible desde la investigación

duración

3 horas aprox.

fecha

29.04.21

dirección y coordinación

Patricia Gallardo Arias

ponentes invitados
(por orden de aparición)

Teresa Rojas Rabiela
Cuauhtémoc Velasco Ávila
Aida Castilleja González
Carlos Sola Ayape


en colaboración con la Secretaría de Cultura y el INAH

 

 

equipo editorial.

Romain Roy-Pinot
coordinador del área de investigación

Rocío García Camarero
arq. de restauración y rehabilitación de patrimonio

Aimée Mancilla Porraz
arq. de conservación del patrimonio

 

 

créditos foto de portada.

Chinampas de Xochimilco.
postal de 1985.
(fuente desconocida)

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